La lista de animales en posesión de Hayek incluiría hasta 30 ejemplares, entre perros, gatos, caballos, lobos, tortugas, conejos, patos, monos y más…

La reconocida actriz mexicana Salma Hayek ha vuelto a generar controversia en las redes sociales al compartir imágenes de sus exóticas mascotas. En esta ocasión, la estrella de cine posó en Instagram con un búho posado en su cabeza, desencadenando críticas y comentarios cuestionando la elección de animales poco convencionales como compañía.

La instantánea muestra a Salma Hayek relajada en un sillón, sosteniendo hojas en sus manos, mientras el búho se aposenta en su cabeza. Ante la avalancha de críticas, la actriz no dudó en aclarar que el ave rapaz se convirtió en su compañero tras ser rescatado, justificando la decisión de ofrecerle un hogar adaptado a sus necesidades.

La polémica se intensificó cuando se reveló que este no es el único animal exótico que comparte la estrella con su audiencia. Salma Hayek ha mostrado en diversas ocasiones otras singulares mascotas en sus perfiles, desencadenando un acalorado debate entre los usuarios de las redes sociales.

Entre las especies que la actriz ha exhibido se encuentran una alpaca, que demanda un espacio considerable y condiciones específicas para su cuidado, así como un caballo oscuro regalado por el difunto Joan Sebastian. La lista de animales en posesión de Hayek incluiría hasta 30 ejemplares, entre perros, gatos, caballos, lobos, tortugas, conejos, patos, monos y más.

No obstante, los detractores de la actriz señalan los desafíos que conlleva tener animales exóticos como mascotas. Problemas relacionados con la alimentación, el espacio y las condiciones de vida adecuadas para cada especie son cuestionados por aquellos que consideran inapropiado tener estos animales fuera de su hábitat natural.

Especialistas en bienestar animal insisten en que algunas especies, como el búho, no son aptas para ser domesticadas y pueden exhibir comportamientos agresivos. Además, resaltan que la posesión de animales exóticos puede involucrar cuestiones legales, ya que en algunos países la tenencia de ciertas especies está restringida.

La dualidad de opiniones persiste, dividiendo a quienes elogian la dedicación de Salma Hayek hacia los animales y aquellos que la critican por lo que consideran una exhibición irresponsable de especies no convencionales como mascotas. La polémica continúa, generando un debate en torno a los límites éticos y legales de tener un «zoológico» personal.

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